Tecnifuego ha celebrado una jornada monográfica sobre la incidencia de las catástrofes naturales y sus daños en las instalaciones de protección contra incendios (PCI). Entre los ponentes, Alfonso Manrique, subdirector de Tasaciones Consorcio de Compensación de Seguros, puso el acento en la importancia de la prevención para disminuir la vulnerabilidad.

“Gran parte de las instalaciones de una empresa, incluido los sistemas PCI, están en sótanos, fosos, etc., es decir bajo rasante. Son por lo tanto muy vulnerables frente a inundaciones”, concretó. En su propuesta de prevención, analizó los sistemas de protección contra inundaciones. “Hay que diseñar los sistemas PCI tanto para proteger contra incendios, como para que estén protegidos contra inundaciones… Diseñar las puertas cortafuegos, también como corta-inundaciones, de modo que aislemos las zonas inundadas y no se extienda a toda la planta. Por ello es esencial situarlos en una cota más elevada”, defendió.

“La protección de la estructura es uno de los aspectos más relevantes que debe conseguir la protección pasiva, sin embargo, los escenarios de fuego no responden en absoluto a lo que pasa en una catástrofe. Cuando calculamos la protección de estructuras de pasiva no consideramos movimientos que se puedan producir por terremotos, nieve o inundaciones”, apuntó, en su intervención, Rafael Sarasola, coordinador del Comité de Instalación y Mantenimiento de Protección Pasiva de Tecnifuego.

Fuente: BDS editado por INESE a 26 de marzo de 2021