La tecnología avanza, eso es un hecho, y quien no la utilice en su propio beneficio tardará más o menos, pero se quedará fuera del mercado, y eso es otro hecho. No obstante, hay otro hecho y es que en cuanto a resolver un siniestro con plenas garantías, gastando lo justo, y controlando la buena reparación del mismo, el perito es el protagonista. Que nadie se olvide de esto. Las herramientas digitales, tasación, videoperitación, etc, son solo eso, herramientas que ayudan al perito y que, en el caso de la videoperitiación, además ayudan al medio ambiente, Pero son herramientas al fin y al cabo. Si no hubiera un perito detrás de ellas no servirían de mucho.

Ahora viene la gorda. Llega la Inteligencia Artificial. Esta tecnología es para muchos la panacea, la fórmula para reducir gastos, controlar el coste medio, mejorar definitivamente la atención al cliente, educir el momento FNOL (First Notice of Losse), mejorar la productividad, etc. Pero, ¿qué alcance tiene hoy en día la Inteligencia Artificial?

El alcance real de la IA en Autos en este momento a nivel de efectividad, y de fiabilidad, no llega como para ser usada de forma regular en la identificación y tasación de siniestros. La suciedad, los brillos, reflejos, el ángulo de obtención de la foto, pueden todavía engañar al sistema, lo que se llama enmascaramiento en la ingeniería del ruido.  Sin embargo, actualmente, es una buena herramienta para usarla en verificación de coches no nuevos con solicitud de garantías de daños o para un reporte previo de daños.

Que las siguientes evoluciones de estos sistemas podrán ofrecer en un futuro la fiabilidad necesaria para poder realizar la identificación y tasación de daños en cuanto a siniestros exteriores de autos se refiere, seguro. Pero, ¿será la IA capaz de identificar y registrar daños internos en automóviles? Todo es posible, aunque si en algún momento esta tecnología es capaz de hacerlo, desde luego que va a ser a muy largo plazo. Es decir, el perito de Autos sigue siendo, si me permitís el símil, la mejor “herramienta” para establecer la identificación y tasación de los daños., así como la identificación de fraudes, no nos olvidemos de esto último, ya que supone una cifra multimillonaria de ahorro al año.

En riesgos Diversos he leído alguna noticia sobre que la IA es capaz de identificar los daños, reconocer la causa, y reducir el momento FNOL…¡Qué no nos vendan motos viejas!. En Gistek conocemos bien esta tecnología y sabemos que la IA se desenvuelve con soltura cuando sabe de qué elemento se trata: Y le hemos enseñado los diferentes tipos de desperfectos que se pueden dar, por ejemplo, en un cristal, o una placa vitrocerámica. Aun así, sería posible engañar al sistema con relativa facilidad. Ni os cuento en manchas de humedad.

No obstante, a la IA todavía le queda un recorrido tremendo para ser utilizada de forma habitual, cuando todavía el 60% de las aseguradoras ni siquiera están utilizando la videoperitación. Aunque de tanto hablar de la videoperitación parece que es una tecnología amortizada, lo cierto es que todavía le queda muchísimo que ofrecer. Hoy en día, tan solo hay tres aseguradoras de primer orden que la utilizan de forma intensiva, por lo que todavía le queda mucho recorrido al sector asegurador. Y en la videoperitación el protagonista, ¿quién es?, sin ninguna duda, el señor perito.

Fuente: BDS editado por INESE a 25 de junio de 2021